Llevan meses vendiéndonos la política de recortes como la única vía, la única manera de salir de la crisis. Gastamos demasiado, el sistema es insostenible. Se habla de gasto, no se habla de inversión. El juego de siempre con las palabras.
Cuando te repiten y te machacan mucho tiempo con la misma mentira terminas por asumirla como una verdad. Pero hay corrientes de pensamiento diferentes a la ideología que nos muestran como única. Y no se trata de gente que no sabe de lo que habla. Economistas como los nóbeles Paul Krugman y Joseph Stiglitz, y a nivel estatal, el catedrático Vicenç Navarro. Ellos y tantos otros nos advirtieron de lo que se avecinaba cuando el resto estaban cómodos asesorando la fiesta de las grandes corporaciones financieras.
Hay alternativas, y nos las explican muy bien. Coinciden en el aumento del gasto público como medida esencial para que haya estímulo económico. Esto no es algo nuevo, ya lo hizo Roosevelt en EEUU para salir de la Gran Depresión. Su solución fue aumentar la demanda redistribuyendo las rentas en aquel momento de gran desigualdad (situación en cierta manera similiar a la de ahora) para que la población asalariada pudiera consumir. Se estableció el estado del bienestar (New Deal), se regularon los mercados y los bancos y llegó a tasar un 91% en renta y patrimonio a esa gran minoría que en aquel momento había acumulado gran parte de la fortuna del país.
En España no hay motivos para pensar que no se podría tomar un camino parecido (nuestro gasto social es de los más bajos de la UE-15). Se podría (y debería) hacer una reforma fiscal profunda. Los ingresos del Estado son del 32% del PIB, mientras la media de la UE-15 es del 44%. La diferencia no lo es tanto en los impuestos que pagan las personas en nómina, sino en lo que no pagan las grandes fortunas.
El fraude fiscal, es la gran desgracia española, y se debería eliminar de inmediato. El 72% del fraude en España se da a cargo de las grandes empresas, entidades bancarias y grandes fortunas, y se contabiliza en 44.000 millones de euros. ¿Cómo es posible entonces, que nos hablen de que es necesario renunciar a unos servicios básicos como son sanidad, educación, pensiones...? Los asesores del PP aconsejan recortar el gasto público en 25.000 millones de euros.
Es algo tan sencillo como que no hay voluntad política. Nos gobiernan personas que defienden más los ingresos de esa minoría de poderosos que el bienestar de la inmensa mayoría de la población. Día a día nos bombardean con mentiras y millones de personas caen en la trampa de no ver más allá, de no informarse y de no contrastar.
Y así nos vemos hoy, con una (desproporcionada) mayoría absoluta de un partido que no va a hacer sino desmantelar el estado mínimo de bienestar que teníamos. Y no sabemos lo que tenemos hasta que nos lo quitan. El negocio de los fondos de pensiones privados, sanidad privada etc es fácil y jugoso, porque es un negocio seguro si privas a la gente de un servicio público, universal y de calidad y les pones entre la espada y la pared.
Llegan tiempos de lucha. Tiempos en los que tenemos que reaccionar e informarnos más que nunca para ser libres y no dejarnos engañar por el beneficio de unos pocos.
La información está ahí, sólo hay que buscarla.
Es verdad... a lo que nos están llevando los recortes es a más y más paro y a más pobreza.
ResponderEliminarEstá claro que los gobiernos europeos sólo tienen la mirada neoliberal para atajar la crisis, con esta mirada gana el capital y perdemos todos los demás que somos la mayoría !!!!
Desde luego, toca estar bien informados por otras fuentes diferentes a la televisión y prensa, toca unirse a las iniciativas ciudadanas contra las medidas neoliberales y participar en las protestas que podamos.
¿Qué más podemos hacer?
"El capitalismo no ha funcionado mal, el capitalismo es esto" Miren Etxezarreta
ResponderEliminarEstoy totalmente de acuerdo con lo que dices y las posturas de Krugman, Navarro y compañía.
ResponderEliminarSólo un apunte a lo que dices y, por extensión, a la línea de Navarro:
El tema del fraude fiscal es una lacra que tenemos que solucionar, pero mentarla en estos momentos no tiene mucho sentido. Es como la competitividad o la investigación: debemos apostar por ello, pero no nos van a sacar de este agujero. Porque para combatir el fraude hacen falta muchos recursos y tiempo.
Me parece bien que se resalte, porque en lugar de reducir la protección legal y los recursos, deberíamos aumentarlos!!!! Pero enarbolarlo como bandera contra la crisis, como he visto muchas veces, no sirve. Y te enzarzas en discusiones sobre supuestos en lugar de darle caña a cosas más importantes, como subir los impuestos a ese 1% de los ricos!!!!