8 may 2014

Los derechos de hoy, las luchas de ayer

El Peak National Park es un paréntesis de naturaleza entre las históricas ciudades industriales de Sheffield y Manchester, al norte de Inglaterra. Sus páramos con descomunales piedras de formas imposibles, sus colinas redondeadas y sus valles verdes fueron una vez soñados por todos aquellos que no eran aristócratas.

Imaginaba que una visita a cualquiera de las dos ciudades estaría cargada de ecos de las luchas libradas por los trabajadores de la mina y del metal, llena de historias de resistencia, de reminiscencias de un pasado marcado por la amargura de la derrota en esa lucha de clases cuando el neoliberalismo aterrizaba en Europa abanderado por la dama de hierro.

El sábado salí de la gran ciudad buscando vaciar mi cuerpo de la toxicidad urbana sin otro objetivo más allá de sentir la libertad que te regalan los montes, para darme cuenta de que hace casi un siglo hubo quienes se jugaron la suya intentando conquistar esto mismo, su derecho a disfrutarlos.

Al Kinder Scout, el páramo más alto de la zona, no estaba permitido el acceso al público. Como tantas y tantas tierras estaba en manos de aristócratas y los guardabosques vigilaban el acceso. El 24 de Abril de 1932, un grupo de 400 jóvenes de Manchester hartos de no poder disfrutar de los campos y los montes decidieron asediarlo en masa. Desde el otro lado, tambíen subió un grupo de Sheffield. Pese a la oposición de los guardabosques y por la diferencia en número consiguieron por primera vez pisar el monte, contemplar las vistas, respirar su aire. 5 de ellos fueron encarcelados. A las semanas, fueron 10.000 los que se reunieron para subirlo en solidaridad.

Este ejercicio de acción directa fue decisivo para que posteriormente Peak District fuera declarado el primer parque nacional del país. Y para que se empezara a legislar sobre la apertura de los campos y montes al uso recreacional. Parece ciencia ficción, pero es así. Los montes eran de los ricos. Y haber podido disfrutar de él el sábado se lo debo a aquellos muchachos que hace más de 80 años decidieron desobedecer.

Los derechos de los que disfrutamos hoy descansan sobre las luchas de los que un día sabían que eran suyos. Y se organizaron. Y los ejercieron. Y los recuperaron.



"So when you climb up Kinder now
"Así que cuando subas al Kinder ahora
And feel your legs strain hard against the earth,
Y sientas el esfuerzo de tus piernas contra la tierra, 
And fill your lungs with fresh free air,
Y llenes tus pulmones con aire fresco y libre,
And watch the long brown hare,
Y observes a la liebre marrón,
Kicking its legs in the very ecstasy of life,
Correr en el éxtasis de la vida
 
Remember there are those who would have kept this from us,
Recuerda que hay quienes nos hubieran privado de esto,
And those who even now woud, if they could,
Y quienes todavía lo harían, si pudieran,
Keep us from the silver stream and open moor,
Privarnos del arroyo plateado y el páramo abierto,
And windswept wood."
Y del bosque azotado por el viento."

David Toft, "Climbing Kinder 1932-2012"